El caso del refugiado sirio y la labor de las redes sociales
Las redes sociales no solo son un medio de comunicación, información y entretenimiento, sino que también son una gran herramienta para recaudar fondos.
En muchas ocasiones vemos a las redes sociales como una simple forma de entretenimiento, información o comunicación inmediata. Sin embargo, a veces olvidamos que uno de los pilares del Internet es la de borrar las barreras de la distancia y del idioma, ya que es capaz de comunicar a personas en todo el mundo, así como de unirlas.
Una muestra de ello fue la imagen del refugiado sirio, Abdul Halim Attar, misma que cruzó el mundo entero y se convirtió en una campaña para recaudar fondos, la cual tenía como meta US$ 5 mil. Sin embargo, logró 191 mil, dinero con el que Abdul Halim abrió un restaurante y sacó adelante a su familia.
Lee también: La imagen viralizada en Twitter que logró miles de dólares para un refugiado sirio
La recaudación de fondos para ayudar a Abdul Halim fue por medio de Indiegogo, una plataforma de crowdfunding que ayuda a personas, grupos y organizaciones sin fines de lucro, a vender sus ideas para conseguir dinero y volver sus ideas realidad. Si bien, Indiegogo es una de las plataformas más conocidas, existen muchas otras como Kickstarter, Fondeadora, Crowdfunder o Ideame, las cuales permiten llevar proyectos locales a la comunidad global.
Pese a que este tipo de plataformas está mucho más enfocado a productos, también es una gran forma de dar a conocer un problema social y, además, puede ser una gran forma de poder apoyarlo.
Syrian father selling pens in the streets of #Beirut with his sleeping daughter #Lebanon #Syria pic.twitter.com/KOz4mjW1rd
— Gissur Simonarson CN (@GissiSim) agosto 25, 2015
En conclusión, Twitter no es un arma revolucionaria como tal, lo que sí puede hacer divulgar una situación o acontecimiento lo suficientemente rápido y alcanzar cualquier parte del mundo. Después, únicamente se necesita que un grupo de personas o una persona decida hacer el cambio para modificar el destino de una o muchas personas.